Estrategias para aumentar tu nivel de felicidad
“Agradecida por empezar mi año de vida en positivo.
Feliz por aprender que la gratitud puede reducir el estrés, mejorar el sueño y hacerme más feliz.
Afortunada por tener un diario precioso en el que solo escribiré pensamientos positivos”
Así comienza el “Diario de la gratitud”, un inspirador libro autobiográfico cuya autora Janice Kaplan, escritora, productora de televisión y periodista, nos cuenta cómo la experiencia de vivir un año en gratitud transformó su matrimonio, su trabajo, su relación con el dinero, su salud y forma física y su experiencia vital en general.
Todo comenzó una Nochevieja, cuando Kaplan decidió que quería cambiar su actitud vital a través de la gratitud, y lo consiguió. Ese nuevo año se propuso dos objetivos: escribir un diario dando las gracias al menos por una cosa al día, y hacer una extensa investigación sobre los efectos de la gratitud en su vida y en la de los demás.
Mediante múltiples entrevistas a decenas de expertos (entre ellos, médicos, neurocientíficos, investigadores, académicos, terapeutas y filósofos), pero también a celebridades como Matt Damon, Daniel Craig y Michelle Pfeiffer, la autora nos descubre que la gratitud no es lo mismo que la felicidad (que puede ser frágil y fugaz), sino que posee unas raíces emocionales más profundas, es más duradera y resulta inmune a los cambios y desafíos.
Expresar gratitud significa mucho más que decir “gracias” de manera correcta y educada. Robert Emmons, uno de los investigadores más importantes sobre la gratitud la define como “la sensación de maravillarse, agradecer y apreciar la vida” . Practicar la gratitud significa centrarnos en el momento presente , apreciando nuestra vida tal y como es, así como todo aquello que ha contribuido a tener la vida que tenemos en este momento. Las personas que tienen el hábito de expresar gratitud son generalmente más felices, tienen más vitalidad, visualizan el futuro con mayor optimismo y experimentan emociones positivas con mayor frecuencia.
Asimismo, la gratitud nos lleva naturalmente a ayudar a los demás, ya que apreciamos todo lo que tenemos y sentimos la necesidad de devolver a la sociedad aquello que nos ha brindado. A través de la gratitud, nos será más fácil desarrollar relaciones interpersonales más sanas y profundas, un elemento clave para mantener un clima familiar positivo. (Lucía Ceja, investigadora de la Cátedra de Empresa Familiar del IESE)
¿Y como funciona esta herramienta tildada por los expertos como una de las más potentes para alcanzar la felicidad? Llevar un “Diario de Gratitud”, consiste en escribir en una libreta cuando estemos más inspirados, por la mañana, por la tarde, en un descanso..una o dos cosas por las que nos sintamos especialmente agradecidos, algo que nos haya hecho sentir bien, desde la cosa más cotidiana (por fin han arreglado el ruido de la puerta que chirriaba) hasta la más profunda (mi primer día de trabajo en la empresa, la sonrisa de mi hijo, la belleza del mar…). No se trata de escribir de manera obligatoria todos los días, puedes empezar un día a la semana o si te gusta y te motiva puedes hacerlo todos los días. Cuanto más lo hagas el efecto positivo en ti será mayor, porque agradecer provoca felicidad y ayuda a poner el foco en lo que hay, lo que tienes. Ser feliz no es hacer lo que uno quiere, sino querer lo que uno hace, y esta herramienta ayuda a descubrir que nosotros mismos somos quienes creamos nuestra propia felicidad.
Puede ser que no te apetezca ponerte a escribir un diario físico, y para ello podemos utilizar una estrategia alternativa, como pararte a reflexionar antes de cerrar los ojos en la cama y agradecer por algo bueno que te ha ocurrido en el día. Te sorprenderás el cambio de actitud que se produce en ti, ya que el obligarte tu mismo a poner el foco en lo bueno que tienes provoca emociones positivas que se traducen en mayor calidad de vida no solo propia sino hacia las personas que te rodean.
Y siguiendo la senda de la gratitud, otra manera muy potente y que empodera mucho a quien la da y la recibe es hacerlo directamente con otra persona. Es espectacular el efecto que produce practicar el agradecimiento a alguien de tu entorno personal o laboral.
El reto es hacerlo con aquellas personas que te resulta más difícil. Escribe una carta, un e-mail o agradécele directamente cara a cara. Describe en detalle lo que él o ella ha hecho por ti y el efecto que ha tenido en tu vida.
Practicar la “Gratitud Consciente” es el mejor regalo que te puedes dar en este año que comienza. ¿Te atreves a practicarla?
Recuerda que tú puedes ser un cambiador del mundo si logras mirar la vida y las personas que te rodean a través de las “gafas de la gratitud”.
Dora De Teresa
Talent Manager, Exjuez, Abogado, Executive Coach, Directora GO UP